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Casa de Sebastían Gaboto

Rancho del siglo XVI podría haber sido de Gaboto o de Zárate


El conocido antropólogo uruguayo José López Mazz comentó el reciente hallazgo de un asentamiento del siglo XVI ocurrido en Soriano. Se trata de un vestigio de rancho construido en el inicio de la conquista de los españoles en el Río de la Plata.

Manejan dos hipótesis: que haya sido enclave de Gaboto o de Ortíz de Zárate.
“Los hallazgos confirman que a dos kilómetros de la desembocadura del río San Salvador se ha encontrado la asociación de un conjunto de elementos de un rancho del siglo XVI”, informó el especialista y comentó que ese lugar ya aparece en mapas que datan del año 1545.

Ahora funciona allí una estancia, cuyos dueños colaboraron con la investigación. Los restos encontrados están en la escuela pública de la zona. Se trata básicamente de cerámica.
“Fuerte no hay. No hay rasgos de estructura”, afirmó. Pero el lugar existió y estos trabajos sirven para “que deje de estar en el imaginario y que la gente pueda verlo”, remarcó el antropólogo.

En enero de 2011 dos buzos deportivos hallaron fragmentos de cerámica colonial española en el fondo del río San Salvador, departamento de Soriano, no lejos de la desembocadura con el río Uruguay. Los restos se encontraban entre una formación de piedras que resultaron ser parte del lastre de un navío.

Los buzos informaron a la Intendencia de Soriano y esta a su vez se contactó con la Comisión Nacional de Patrimonio, quien envió un grupo de arqueólogos liderado por López Mazz a inspeccionar el área.
Luego de comprobarse el rico potencial del yacimiento, se dispuso que se realizaran prospecciones de arqueología subacuática y terrestre, las que suministraron evidencias de que en esa zona podrían encontrarse tanto los restos del asentamiento español de la expedición de Sebastián Gaboto de 1527 llamado "Puerto de las naos de San Salvador", como del que fundara unos años después el adelantado Ortiz de Zárate, en 1574, conocido como ciudad Zaratina.
 
En febrero de 2014 se realizó una nueva campaña subacuática, con las dificultades que presenta el río San Salvador: “son aguas totalmente oscuras y hay que bajar siete u ocho metros”. Como los investigadores no encontraron restos de madera del navío, sólo las piedras de lastre, López Mazz piensa que esto se debe a que “cuando los marineros ponían los barcos de costado para calafatearlos el lastre se caía”.
A su vez los arqueólogos también hallaron “herramientas de calafateo y una sondaleza, que consiste en una plomada que pendía de una cuerda, con la que medían la profundidad”. Además descubrieron un tipo de loza decorada con reflejos metálicos conocida como mayólica y fragmentos de “contenedores grandes muy parecidos a las ánforas romanas”.

Muchos se preguntan si el lugar en donde se encontraron los restos estuvo ocupado antes de la llegada de los europeos por poblaciones indígenas. “Por su situación geográfica ese enclave, desde el que se domina la entrada a los dos ríos más importantes de la región, ya era importante para los indígenas, mucho antes de la llegada de la expedición de Gaboto”, responde López Mazz.

Opina que es probable que Gaboto haya encontrado un asentamiento indígena ya instalado en el lugar “porque tiene a favor que está en una elevación y está muy bien ubicado en la red fluvial. Está a dos kilómetros del río Uruguay, cerca de del río Negro y del Río de la Plata. Además, casi enfrente de la desembocadura del San Salvador con el Río Uruguay está el delta del Paraná, por donde después subirían buscando el oro y la plata”. Opina que “se ve que Gaboto vio ese lugar importante y lo tomó. No creo que fuera a vivir al lado de los indios”, dice irónico.


Agrega que “la ocupación del lugar siempre fue intensa”, lo que hace pensar “que en ese lugar los indígenas se reunían para intercambiar productos y de ahí la gran cantidad de cerámica hallada”. Señala que “en el nivel estratigráfico que corresponde a la llegada de los europeos encontramos cerámica de muchos tipos (chaná y guaraní), que muestra la diversidad étnica que había en el lugar”.

 De todas formas, López Mazz considera  que será difícil distinguir el emplazamiento de Gaboto del de Ortíz de Zárate: “porque son sólo cuarenta y cinco años entre un emplazamiento y otro. En 1529 se va Gaboto del puerto de San Salvador y en 1574 llega Zárate.  

En realidad Gaboto no funda una población, sino que deja sus barcos en un meandro del río; por eso el lugar se llama "Puerto de las naos de San Salvador”. En mayo de 1527 Gaboto remonta el río Paraná dejando las naves Trinidad y Santa María custodiadas por unos treinta españoles junto a un grupo de guaraníes. Río arriba, al norte de la actual ciudad de Rosario, Argentina, funda el fuerte de Sancti Spiritu. “Paradójicamente estos dos lugares, el Puerto de las naos y Sancti Spiritu, fueron buscados por los historiadores por cuatrocientos años. Ya en 1801 los españoles los quisieron encontrar, porque eran emblemáticos como símbolo de la conquista del Río de la Plata”, asegura, tan difíciles de hallar porque   "Fueron ocupaciones muy efímeras y por eso se las traga la tierra”.
Sin embargo “en 2010 los argentinos encuentran Sancti Spiritu, y en 2011 nosotros encontramos este sito”.
 


En noviembre de 2013 los arqueólogos uruguayos invitaron a los colegas argentinos que excavan Sancti Spiritu para que vieran el sitio arqueológico y el material encontrado. La visita fue importante porque los arqueólogos argentinos ya conocían el material encontrado en la excavación de la primera fundación de Santa Fe, de 1573, o sea "de la época de Ortiz de Zárate”. Si la cerámica encontrada en el yacimiento de San Salvador hubiera sido similar a la de Santa Fe, eso probaría de que en ese lugar estuvo la ciudad Zaratina fundada por Ortiz de Zárate. Pero en cambio, al comparar el material los argentinos “nos dijeron que la cerámica de San Salvador es parecida a la de Sancti Spiritu". Gracias a ello es que se ha podido identificar el sitio como “más atribuible a Sebastián Gaboto” que a la expedición de Ortiz de Zárate.

Creo que Zárate, que traía colonos para fundar una ciudad, buscaba el mismo lugar donde había estado Gaboto”. Por eso piensa que los dos sitios están superpuestos. “No sabemos, ya que no lo dicen los documentos, en qué consistía el asentamiento de Gaboto”.

El área del sitio arqueológico es muy extensa y hasta el momento se han excavado cien metros cuadrados. “Recién empezamos, por eso no sabemos si tiene una estructura de poblado o si sólo eran cuatro cabañas rodeadas de una empalizada. Esperamos más que sea esto último, o una trinchera que les permitía una defensa y no más que eso”.
Igualmente ya se han encontrado “pisos como de cabaña, donde la tierra está negra y compactada”. También han hallado las marcas donde clavaron postes, donde “se ven unas manchas negras de sedimento mucho más compactado, que eran los agujeros de postes que marcan donde estaban las estructuras”.
Piensa que el descubrimiento conjunto de ambos sitios es una oportunidad “para recuperar la historia regional. Es una lección interesante, una historia que une a la región más que separarla".


Fuentes:
Nota extraída de: http://www.elpais.com.uy/cultural/arqueologo-que-busca-sebastian-gaboto.html
Fotografía: http://eltallerdejar.blogspot.com/2014/11/encuentran-el-puerto-de-gaboto-en-el.html

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