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Los Fenicios



 

Los pueblos que evolucionaron en Egipto y Mesopotamia se organizaron en civilizaciones llamadas de tipo fluvial. En ellas la vida se desarrolló en las llanuras fertilizadas por grandes ríos y lejos del mar. En cambio, en las costas e islas del mar Mediterráneo, se desarrolló un tipo de civilización diferente que los sociólogos llaman "marítima". En ella los hombres solucionaron sus necesidades no sólo por el trabajo de la tierra, sino principalmente por la industria y el comercio, utilizando el mar para comunicarse, fundando colonias alejadas.
Las principales civilizaciones de carácter marítimo fueron: la Cretense en la isla y costas del mar Egeo que fue maestra de los fenicios y los griegos. La Fenicia en la costa de Siria sobre el mar Mediterráneo, y la Griega en la costa de Asia Menor. Estos son llamados "Pueblos del Mar"

FENICIA
Los fenicios nunca se llamaron así mismos de esta manera, cada uno se identificaba con el nombre de la ciudad en la que vivían. Fueron los griegos quienes empezaron a denominar a éstos con el nombre del color de las telas de lino y algodón  que vendían: la púrpura (phoinix) que obtenían de un molusco llamado múrice; por lo que ser fenicio significaría "hombres de colorado".
Establecieron grandes industrias metalúrgicas, de cerámica, vidrio transparente y tejidos. 
Moneda fenicia
El territorio de Fenicia (parte del actual Líbano) estaba constituído por una estrecha franja de tierra, de unos 200 km de largo por unos 25 km de ancho, ubicado en el norte de Siria, entre la cordillera del Líbano y el mar Mediterráneo.
Era un país pequeño, que comenzó a poblarse hacia el año 2400 a.C, con suelo montañoso pero que tenía valles fértiles donde se cultivaba trigo, olivo, vid y melones, y especialmente era rico en árboles, como cedros, cipreses y enebros, que producen buenas maderas. La costera alta, con playas estrechas bordeadas de palmeras y bahías de aguas profundas.
Su geografía los llevó a concentrarse en desarrollar una economía basada casi totalmente en la actividad marina, dejando de lado la agricultura. Con el paso del tiempo fueron especializándose en la construcción de barcos, el desarrollo de importantes instalaciones portuarias, y el fortalecimiento de una actividad comercial que los llevó a surcar la aguas de casi todo el mudo conocido y a desarrollar una importante industria manufacturera. Su carácter los alejó completamente de una actitud conquistadora, convirtiéndose en comerciantes y exploradores, lo que los impulsó, a través del intenso intercambio a vincularse con todas las civilizaciones mediterráneas de la época, contribuyendo además, por este medio, a difundir la cultura oriental por el mundo occidental conocido. Esta actividad comercial logró forjar en esta civilización un carácter decididamente enfocado hacia el lucro que, ante la perspectiva de enriquecerse, los llevó a no dudar en traficar con esclavos y alternar el comercio con el pillaje y el saqueo.

PERÍODOS HISTÓRICOS
A lo largo del desarrollo de esta civilización, las más importantes ciudades se fueron alternando en importancia en tal medida, que los períodos históricos de su evolución corresponden a los períodos de dominación de estas urbes, que son: Biblos, Sidón y Tiro.

a) Primer período histórico o de Biblos. (2600 a 1600 a. C.) En este período, que se inicia con el nacimiento de esta civilización, se destaca Biblos como la más importante de las ciudades de Fenicia. Según la tradición, esta ciudad había sido fundada por el dios El, que rodeó la ciudad de una gran muralla.
Baalat Gebal (la Dama de Biblos) era la diosa patrona de la ciudad. Estaba localizada sobre la costa, y fue un importante puerto cuya principal actividad consistía en las relaciones comerciales y religiosas con el vecino Egipto. El fortalecimiento de esta relación derivó en un sometimiento de la ciudad a los faraones del Egipto que motivó su decadencia, marcando el final de este período y posibilitando el advenimiento de otra ciudad portuaria vecina, a la cúspide del poder.
Ruinas de Biblos
Ciudad de Biblos en la actualidad
b) Segundo período histórico o de Sidón ( 1600 a 1200 a. C.) La ciudad de Sidón estaba localizada sobre un promontorio rocoso que daba directamente al mar, y poseía un importante puerto, que además de concentrar su actividad en el comercio marítimo, también era el más importante centro pesquero de Fenicia. Luego de la decadencia de Biblos, el surgimiento de esta ciudad no se vio afectado por el creciente poder de los faraones de Egipto, sino que resultaron beneficiados. Este predominio de los sidonios sobre los mares, se extendió por todo el mar Negro y el mar Egeo, y se prolongó durante unos cuatrocientos años, comenzando su declinación cuando los griegos decidieron cerrarles el paso al mar Egeo, y concluyendo definitivamente cuando los filisteos, pueblo procedente de la isla de Creta, sitiaron la ciudad y la destruyeron.
Sidón en la actualidad
Puerto de Sidón

c)Tercer período histórico o de Tiro ( 1200 a 700 a. C.) La ciudad de Tiro se encontraba localizada centrada en dos islotes rocosos a un kilómetro de la costa. Las numerosas experiencias sufridas por otras ciudades fenicias en diversas épocas, llevaron a los constructores de esta ciudad a establecerse más allá de la costa para evitar los ataques terrestres. Los habitantes de esta ciudad, se especializaron no sólo en el comercio, sino en la exploración y colonización, más allá de que también esto, en definitiva también tenía fines comerciales. El desarrollo de otras civilizaciones en las tierras vecinas, que ambicionaban las fabulosas riquezas de Tiro, sumado a las constantes disputas políticas internas de esa época, ocasionaron la decadencia de la ciudad, hasta que el Rey asirio Senaquerib la ocupó luego de sitiarla en el año 700 a. C., marcando el fin de este período histórico. Algunas ciudades de Fenicia lograron sobrevivir durante algunos siglos más, pero sin  recuperar jamás los esplendores de antaño. Finalmente, en el año 332 a.C. Fenicia fue sometida por Alejandro Magno, lo que provocó su definitiva desaparición.
Ruinas de Tiro

ORGANIZACIÓN POLÍTICA
Fenicia no constituyó un Estado unificado, sino que se organizó a través de ciudades-estados independientes entre sí, que rivalizaban por los beneficios del comercio.
Cada una de las ciudades tení­a una organización monárquica, en la que el rey (denominado sufete)  era secundado por una especie de parlamento de 300 miembros, (asamblea de ciudadanos), y por un concejo de 100 integrantes, con funciones judiciales (Consejo de ancianos).
Luego las ciudades fenicias sufrieron diversas dominaciones extranjeras: de lo asirios, neobabilónicos y los persas sucesivamente.
Durante los períodos de apogeo, el sistema de gobierno de estas ciudades estado fue de carácter teocrático. Sin embargo, el poderoso rey, cuya majestad era recibida por delegación divina, encontraba recortado su poder por un aristocrático consejo de ancianos, integrado por los más ricos comerciantes. El carácter eminentemente pragmático de este pueblo, se reflejaba en las funciones que tenía a su cargo el rey: un  se dedicaba a cobrar los tributos, establecer y dirigir las políticas comerciales, y organizar las expediciones a lo largo de todo el mundo conocido, todo ello, bajo la atenta mirada del consejo de ancianos que fiscalizaba su actuación.

SOCIEDAD
En la cúspide de la sociedad fenicia se encontraba el monarca y los comerciantes adinerados, que ocupaban los cargos de gobierno.
La clase militar no tuvo importancia alguna ya que, al no ser un pueblo belicoso, no formaron un poderoso ejército que según su criterio solamente les serviría para dilapidar el erario, sino que se arreglaban con una pequeña milicia formada por mercenarios, que se encargaba de la seguridad y la protección necesaria sobre las actividades comerciales y viajes de exploración.
La intensa actividad comercial, que brindaba casi la totalidad de los ingresos de las ciudades estado, así como la escasa extensión de tierra que comprendía Fenicia, hizo que casi no existiera la actividad agrícola, determinando la inexistencia de una clase campesina, que era tan numerosa en otras civilizaciones.
Las clases más bajas fueron conformadas por marineros, obreros y artesanos, pero su nivel de vida no era malo, debido a que la situación económica les permitía satisfacer sus necesidades básicas, e incluso  algunos llegaron a alcanzar importantes puestos de gobierno, por sobre los ciudadanos más poderosos, miembros de las aristocracias de comerciantes, industriales y traficantes de esclavos.

COMERCIO E INDUSTRIA
A pesar de que la fama de los Fenicios proviene fundamentalmente de sus actividades comerciales y colonizadoras a través de sus viajes marítimos, también se destacaron en estas actividades por tierra, mediante el tráfico de caravanas de camellos. Estas extensas filas de animales cargados de preciosas mercancías se dirigían desde las ciudades fenicias hacia oriente, por las rutas de Armenia y hacia el África atravesando el desierto del Sahara desde la colonia de Cartago.
De todos modos, la actividad marítima fue la más determinante de su desarrollo económico. Sus  embarcaciones comerciaban con todos los pueblos del mar Mediterráneo y el mar Egeo desde hacía miles de años. Con el paso del tiempo comenzaron a colonizar diversos territorios mediante la fundación de colonias permanentes y factorías estratégicamente localizadas, lo que hicieron intensificar y organizar la práctica del tráfico de esclavos, lo que les proporcionaba enormes beneficios. Esta práctica se desarrollaba mediante la compra de ejemplares que los fenicios pagaban a traficantes, caciques y reyezuelos que obtenían mediante cacerías realizadas en sus territorios. También a menudo ellos mismos invadían poblados y territorios de las costas africanas, para capturar hombres, mujeres y niños en buenas condiciones para ser vendidos como esclavos en sus diversos mercados.
Los barcos que utilizaban eran construidos con maestría por ellos mismos en enormes astilleros que evidenciaban su poderoso desarrollo en la actividad marítima.
Los fenicios se convirtieron en una Talasocracia, del termino griego thálassa, "mar" kratía, "gobierno o poder".
Las naves que construían eran de dos tipos: una ligera, de fácil navegación, que llevaban una vela fija de forma cuadrangular, con una doble fila de remeros; otra más grande y pesada, especial para grandes cargas, que era impulsada por dos velas cuadradas, una grande central, y otra menor a proa, ésta última fija, mientras que la grande era movible y permitía el aprovechamiento de vientos de distinta direcciones.

Navegaban mayormente de día, tratando de evitar alejarse de las costas y durmiendo en campamentos que armaban en la playa durante la noche. Si debían internarse en el mar de noche, procuraban orientarse por las estrellas aprovechando los conocimientos astronómicos obtenidos de los caldeos, tomando como referencia la Estrella Polar, denominada en la antigüedad Estrella Fenicia. Su maestría en el arte de la navegación y el desarrollo de su ingeniería naval, les permitía desconocer límites en sus desplazamientos. Según el historiador griego Herodoto, alrededor del año 600 a. C. los fenicios llegaron a realizar la circunnavegación del continente africano, una verdadera hazaña sin precedentes registrados, que no volvería a realizarse hasta algunos miles de años después. Incluso fueron los descubridores de las islas Canarias, Madeira y las islas Azores, totalmente alejadas de la costa, en el océano Atlántico. Existen muchos defensores de la teoría del “descubrimiento de América” por parte de los fenicios, incluso el mismísimo Cristóbal Colón estaba plenamente convencido de esta posibilidad, pero no existe hasta la actualidad prueba documental alguna.
                                                                                               
Las mercancías que obtenían en un territorio, eran llevadas para su comercialización a su propia tierra, y a ciudades y pueblos lejanos donde las apreciaban enormemente y pagaban por ellas enormes sumas.
De esta forma, cargaban en Arabia esencias, mirra, oro y exóticas piedras preciosas; en Asiria obtenían porcelanas y delicadas piezas labradas en fino marfil, procedentes de la China, telas de hilo, sedas y algodón; de la India provenían las codiciadas especias, finas maderas y perlas. De la zona del mar Negro y de la actual España, traían caballos, y además de, ésta última y de algunas zonas del mar Egeo, obtenían mármoles con los que saciaban los caprichos de reyes y potentados de todo el mundo conocido, que construían sus viviendas y palacios con el fino material. De Egipto llevaban finas telas de lino y cantidades de cereales, al igual que varios siglos más tarde lo haría el imperio romano al convertir el Egipto prácticamente en  el granero imperial. Normalmente, muchas de estas materias primas eran previamente convertidas en productos manufacturados que inundaban todos los mercados y eran muy requeridos.
Así, llegaron a alcanzar tal dominio sobre los mares, que ejercían un virtual monopolio sobre las rutas marítimas a lo largo de todos lo mares conocidos, lo que obviamente comenzó a despertar la codicia de los otros pueblos. Esta situación los llevó a cuidar con tal celo sus conocimientos sobre rutas e industria marítima y comercial, que ante la mínima posibilidad de ver descubiertos sus secretos, no dudaban en hundir sus propios barcos, o abandonar sus factorías, además de difundir aterradores rumores de monstruos marinos, terribles catástrofes naturales y naufragios, que llegaron incluso a seguir asustando a los marinos de más allá de la edad media.

COLONIZACIÓN FENICIA
Los establecimientos que los fenicios instalaban a lo largo de las rutas comerciales, se adaptaban a las diferentes características del territorio a colonizar. 
Colonias fenicias
Existieron tres diferentes tipos de colonias: 1) Las factorías, que eran instaladas en zonas despobladas no muy lejanas a centros civilizados. Allí, luego de un desembarco absolutamente pacífico, instalaban tiendas y almacenes provistas de protección militar, y llegaban a acuerdos con los monarcas de las ciudades y estados cercanos para poder comerciar con sus habitantes y además erigir un templo. Mediante constantes expediciones en ambas direcciones, se comercializaban los productos, que consistían en materias primas, productos manufacturados en fenicia, y productos de diferentes culturas de lejanas tierras.
Existieron numerosos establecimientos de este tipo en las costas del mar Mediterráneo, la costa atlántica y la costa occidental del África.
2) Las concesiones. Éstas se establecían en sectores que les eran asignados dentro de las ciudades, luego de llegar a importantes acuerdos con los monarcas de cada una de ellas. En algunas ciudades llegaron a poseer barrios enteros que se constituían en enormes mercados que aparecían a la vista como barrios de Tiro, Biblos o Sidón.
3) Las Colonias, que eran localizadas en lugares estratégicos de grandes posibilidades comerciales. Algunas de estas colonias fueron el origen de importantes ciudades en lugares como Rodas, Creta, Cádiz (en la actual España), Malta y Cartago (en la costa de Túnez, al norte de África), esta última se luego convirtió  en un importante enclave que llegó a mantener durante mucho tiempo la hegemonía del mar Mediterráneo.
Botella fenicia
La manufactura de productos fue adquiriendo una importancia enorme en la economía, creando las clases de la aristocracia industrial y la clase obrera. La industria, de esta manera fue adquiriendo una importante relación con el arte, el comercio y la actividad marítima. Las factorías y talleres casi no daban a basto para satisfacer la demanda de productos manufacturados desde todos los confines, y por esto llegaron a alcanzar una producción en alta escala que abarató los costos, aumentando más y más las ganancias. Todo tipo de productos salían de las fábricas fenicias, especialmente productos de un fino vidrio sumamente transparente que se fabricaba en Sidón, y que superaba en calidad al producido tradicionalmente por Egipto.

También se destacaron en la producción de armas, adornos y obras de arte en hierro y bronce, incluso de estatuas y bustos de ídolos de las diferentes religiones que profesaban los diferentes pueblos con los cuales comerciaban; productos suntuosos de joyería, utensilios, vasos y vajilla confeccionados en vidrio, oro, plata y bronce.
También adquirieron enorme difusión sus productos de lanas y telas teñidas mediante un procedimiento secreto en la época, que se realizaba con la púrpura, tintura que se extraía de un caracol que se pescaba en sus costas.

RELIGIÓN
Baal
La religión fenicia se basó esencialmente en la idolatría a los astros y otros elementos de la naturaleza a los cuales atribuían poderes divinos y que influían en sus vidas de manera decisiva. El sol representaba a su divinidad principal, denominada Baal (señor), quien era creador y organizador del mundo, y su compañera era Baalit (señora) que era representada por la luna.
La aparente simpleza de estos personajes, no se condice con la cruel y fanática idolatría de este pueblo, y que llegaba a incluir, por ejemplo, el sacrificio de niños que eran quemados vivos en hogueras a los pies de imágenes de bronce de Baal, con el propósito de aplacar su ira. Por otra parte, no existía realmente una figura común de estas divinidades para todos los fenicios, sino que, de la misma forma que cada ciudad tenía su propio gobierno, cada ciudad poseía su propio Baal con sus características particulares.

ARTE Y CIENCIA
Como consecuencia del origen inmigratorio de esta civilización, su territorio y población sumamente pequeños y su permanente contacto con culturas mucho más importantes, desarrolladas e influyentes, podría decirse que los fenicios carecieron de una cultura y un arte netamente autóctonos. Se nutrieron de las diferentes culturas de Egipto y de Mesopotamia que los rodeaban, las que a su vez difundían por todo el mundo conocido.
Su arquitectura estaba fuertemente influída por la cultura egipcia, pudiendo incluso llegar a copiar estilos abiertamente, y la escultura fue inspirada en el arte proveniente de asiria.
Sí fueron originales en cuanto a la escritura; si bien en un principio se habrían manejado con los complicados diseños del sistema jeroglífico egipcio. Su personalidad asombrosamente pragmática, los tiene que haber llevado a dejar este sistema para pasar a desarrollar uno propio que les permitiera desenvolverse con mayor soltura en sus actividades comerciales. De esta forma, crearon un alfabeto de veintidós letras que representó igual cantidad de sonidos, y que incluía vocales –comenzaba con la a y la b- y consonantes. Su utilización se difundió a través de las rutas comerciales fenicias, siendo adoptado por numerosas culturas mediterráneas, hasta constituirse en la base de las lenguas del mundo occidental de la actualidad.
Alfabeto de Fenicia

Comentarios

  1. Me interesa mucho la figura del barco fenicio donde se ven las bodegas y la tripulación trabajando ¿podrían decirme la fuente? Me gustaría tener los datos y conseguir permiso para utilizarla.
    Muchas gracias

    ResponderEliminar
  2. No recuerdo, pero creo que fue en está página http://www.bloganavazquez.com/2010/03/20/unos-pequenos-puertos-fenicios-en-1890-y-ahora-tripoli-beirut-mahdia-tunez-liban/

    ResponderEliminar
  3. Soy Salvador Rodriguez
    Hola Leticia, Me interesa la fuente de la botella Fenicia de Vidrio, Tambien me gustaria conseguir permiso para usarla. muchas Gracias

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Salvador, esa imagen es extraída de imágenes de Google, y se puede utilizar libremente. Saludos.

      Eliminar

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